En esta última semana de clase antes de las vacaciones de Navidad, como parte del módulo de Animación y Gestión Cultural, fuimos a hacer algunas visitas a museos para, además de aprender con los contenidos teóricos que trabajamos en clase, poder salir un poco de la rutina y comprobar de manera más práctica cómo puede llevar a cabo un/una animador/a sociocultural sus funciones en este ámbito y qué cosas se pueden mejorar y cuáles no.
Concretamente voy a hablar de nuestra visita a La Marina para ver la exposición de Antoni Miró en La Base, una nueva sala de cultura que se inauguró el pasado 25 de septiembre con dicha exposición y que estará abierta al público hasta el próximo 30 de diciembre.
El edificio, que estaba prácticamente en ruinas, fue la sede del equipo Alinghi durante la Copa América en 2007 y su estado no era sino el claro reflejo de lo que supusieron las políticas del Partido Popular en Valencia cuando, como ellos/as mismos/as decían, pretendían "poner a Valencia en el mapa", para lo que invirtieron grandes cantidades de dinero pensando sólo en el momento y sin previsión de futuro, entre otras cosas, sobre los edificios que decidieron construir, pues La Base ha estado totalmente cerrada y descuidada durante más de 10 años y han sido necesarias varias remodelaciones para transformarla y rehabilitarla.
Sin duda el cambio ha merecido la pena ya que, paradójicamente, en la actualidad se le está dando un uso público, abierto a toda la ciudadanía (y para todas las edades) de manera gratuita, y destinado a promocionar el arte, la innovación y, sobre todo, la cultura.
En el exterior se encuentran las esculturas que tanta polémica han provocado por representar escenas sexuales explícitas. En mi opinión, no tienen mayor trascendencia y creo que la indignación de la mayoría de las personas solo reflejan la doble moral que existe en la sociedad, pues recuerdo que muchos de los comentarios cuando fue noticia, estaban relacionados con que no eran apropiadas para niños/as y digo yo, ¿todos esos bailes y canciones comerciales de moda que tantos/as pequeños/as imitan y que a menudo denigran a la mujer si lo son? Y este es sólo un ejemplo...
En el interior, el espacio muestra muchas de las obras de Miró realizadas desde 2012, pues ya hubo una exposición en el MUVIM con sus obras anteriores y él mismo quiso que esta exposición se centrara sólo en estas últimas.
Como valoración personal, creo que sus cuadros no dejan indiferente a nadie tanto por el contenido como por la técnica, que me pareció impresionante. De hecho, desde mi ignorancia, nada más entrar, pensé que algunos eran fotos reales, pues lo parecen totalmente.
Las obras pertenecen a diferentes series: Mani-festa, Nuus/Nues, Suite Havana, Costeres i Ponts, Suite Erótica y Personatges y reflejan su visión sobre la realidad, por lo que representan la denuncia social desde una posición o perspectiva de izquierdas e invitan al análisis y a la reflexión y es que, ya nos lo explicaron, detrás de sus cuadros siempre hay algo de manipulación...
Personalmente la parte que menos me gustó fueron los desnudos, no por la calidad que, repito, me parece inmejorable, sino porque sigue transmitiendo la percepción machista que se tiene de las mujeres y, por tanto, la cosificación a la que estamos sometidas, pues, a excepción de pequeñas imperfecciones sin importancia que se podían observar en alguno de los cuerpos (pechos un poco caídos o cicatrices de cesárea), en general todas tenían cuerpos delgados y/o "atractivos" que responden al canon de belleza estipulado como modelo normativo social.
En cuanto a la labor que se realiza desde la Animación Sociocultural, se ofrecen visitas guiadas y talleres a centros educativos, colectivos, familias y niños/as, en los que el/la visitante puede participar de manera activa (comentando, debatiendo...) y realizar actividades acordes a su edad. Para los/as niños/as, por ejemplo, se organizan juegos relacionados con la exposición de manera que rompe con los típicos museos más restrictivos para los/as pequeños/as o que los "apartan" en una zona específicamente habilitada para que puedan jugar o distraerse mientras los mayores ven las obras tranquilamente.
Este detalle me pareció muy interesante e innovador y creo que se debería tomar como ejemplo y trasladar a muchas otras actividades culturales de este tipo, pues es totalmente viable y contribuye a la inclusión, a que nos quitemos ese prejuicio que en ocasiones tenemos con los/las niños/as al verlos/as como una molestia y más bien le demos la vuelta a esta idea para que también puedan involucrarse en las actividades culturales, lo que sin duda, y en la medida de sus posibilidades, les ayudará positivamente en su desarrollo.
En definitiva, me pareció que llevan a cabo una labor admirable ya que contribuyen a ir eliminando esa idea que tenemos de los museos tradicionales en los que los/as usuarios/as solo vamos como meros/as espectadores/as y, remitiéndome a los conceptos ya aprendidos anteriormente, pretenden que haya democracia cultural: que cualquiera pueda participar y aportar algo, como debe ser desde la Animación Sociocultural.
Para finalizar, ya que esta exposición está tan cargada de política y que todos/as contribuimos e influimos en ella, de una manera u otra, me quedo con esta frase que se puede leer en uno de sus cuadros junto al logo de ERPV (Esquerra Republicana del País Valencià) y que insta o anima a los jóvenes a abrir los ojos y a no permanecer indiferentes, es decir, a tomar parte:
"A partir dels 25, o s'es de dreta, o s'es d'esquerra, o no s'es res, o siga, més de dreta"
Zulema
Museo Louvre, París.
Museo Muvim, Valencia.
